Ante la actividad volcánica registrada en el volcán El Reventador durante la noche del 12 de octubre de 2025, un equipo del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN) se trasladó a la zona entre el 14 y el 16 de octubre para realizar tareas de monitoreo. El Reventador, activo desde 2002, mantiene actualmente una actividad caracterizada por la emisión de flujos de lava, la generación de flujos piroclásticos y pequeñas explosiones con columnas de gases y ceniza que se elevan pocos kilómetros sobre el cráter.
El 14 de octubre por la tarde, desde la Hostería El Reventador, los técnicos llevaron a cabo labores de vigilancia utilizando cámaras térmicas y visuales, además de sobrevuelos con un dron equipado con cámaras térmicas y visuales. El objetivo fue medir temperaturas y analizar los cambios morfológicos del volcán. Estas observaciones permitieron confirmar la presencia de un flujo de lava descendiendo por el flanco oriental del cráter, así como un depósito de flujo piroclástico originado por el colapso del frente de lava.
Entre el 15 y el 16 de octubre, los técnicos se desplazaron hasta el Refugio del Volcán Reventador (RVR). Desde allí, con el volcán parcialmente despejado, pudieron registrar explosiones, emisiones de ceniza y el descenso de bloques y material incandescente por sus flancos (Fig. 2).
Se realizaron sobrevuelos adicionales con drones, lo que permitió analizar con mayor precisión la morfología del cráter y los depósitos, así como el contraste térmico del edificio volcánico. También se llevaron a cabo levantamientos fotogramétricos para mapear y medir los depósitos recientes (Fig. 3).
Igualmente, se llevaron a cabo trabajos de campo en los depósitos distales del flujo piroclástico, donde se registraron temperaturas in situ de hasta 370 °C y se recolectaron muestras de bloques de lava para su análisis geoquímico, mineralógico y petrográfico (Fig. 4).
Se realizó el mantenimiento de la red de cenizómetros ubicados cerca del volcán (Fig. 5), incluyendo los instalados en la Hostería El Reventador (a unos 7,6 km al sureste del cráter) y en el Refugio del Volcán Reventador (RVR, a 3,6 km al sureste). Además, se recolectaron muestras de ceniza acumulada entre el 12 y el 14 de octubre en los paneles solares de las estaciones RVR y LAV4, para su análisis posterior en laboratorio. Estas acciones aseguran una recolección óptima de muestras, fundamentales para evaluar la actividad eruptiva.
Finalmente, se llevó a cabo el mantenimiento de los equipos de monitoreo continuo. En la estación RVR, se ajustaron las cámaras del sistema VIGÍA, mientras que en la estación LAV4 se reemplazó el GPS y se limpiaron los alrededores (Fig. 6).
H. Calderón, E. Telenchana, B. Bernard, F. Vásconez
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
Disminución de la actividad interna y superficial del volcán
Resumen
El 12 de octubre de 2025 a las 18:23 (hora local), los instrumentos de vigilancia se registraron un flujo piroclástico que descendió 3,1 km por el flanco oriental del volcán El Reventador, y alcanzó la cota de 1400 metros bajo el nivel del cráter. Este fenómeno fue provocado por el colapso del frente de un flujo de lava que estaba saliendo del vento oriental del volcán. El flujo piroclástico produjo una columna de ceniza que alcanzó 2,3 km sobre el cráter, y generó una leve caída de ceniza en zonas del cantón El Chaco, provincia de Napo.
En los días previos, se detectó una disminución en el número diario de explosiones, pero un aumento en la emisión de dióxido de azufre (SO₂), que alcanzó las 265,5 toneladas el día 11 de octubre. El evento estuvo acompañado de una señal de tremor que duró aproximadamente 50 minutos. Desde el 25 de octubre se registra un leve incremento del número de explosiones y una marcada disminución de la cantidad de SO2 medido desde los satélites.
En vista de lo ocurrido se hizo una campaña de campo los días 14 y 15 de octubre para realizar mediciones y observaciones directas y muestreo de los depósitos producidos. Mediciones de temperatura con dron equipado con cámara térmica, revelaron temperaturas superiores a 550 °C en los cráteres activos y el flujo de lava, mientras que los bloques del flujo piroclástico mantuvieron temperaturas de hasta 370 °C tres días después del evento.
Las imágenes infrarrojas mostraron cambios morfológicos como son la una expansión del cráter y un ligero cambio en la dirección del flujo de lava hacia el este, en comparación con abril de 2025, fecha de la última campaña de campo. Para el 15 de octubre, el flujo de lava medía 810 m de largo y 240 m de ancho, cubriendo un área de 0,12 km² y con un volumen estimado de 1,1 millones de m³. Por su parte, el flujo piroclástico alcanzó una distancia de ~2450 metros desde el frente del flujo de lava y cubrió un área total de 0,25 km2. Es decir que se trató de eventos de tamaño pequeño en comparación a la erupción de 2002 (13,2 km2).
Tras el evento, la actividad interna se mantuvo en niveles moderados y la superficial en niveles altos. Aunque la situación se ha estabilizado, no se descarta la generación de nuevos flujos piroclásticos, debido a que el flujo de lava sigue activo. Por ello se recomienda:
• Evitar acercarse a los flancos del volcán.
• Tomar medidas preventivas en caso de caída de ceniza.
• Mantenerse alejado de los cauces cercanos al volcán debido al riesgo de lahares por removilización de material suelto en caso de lluvias.
El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN) continúa con la vigilancia y emitirá comunicados en caso de cambios significativos en la actividad volcánica.
Cómo citar/how to cite: IGEPN (2025) – Informe Volcánico Especial – El Reventador – N° 2025-002. Quito, Ecuador.
Antecedentes
El volcán El Reventador de 3 570 metros de altura y localizado en la zona Subandina, es uno de los volcanes más activos del Ecuador. Es un estratovolcán localizado al interior de una cicatriz de deslizamiento en forma de herradura de 4 km de ancho por 6 km de largo en el antiguo volcán llamado Paleo-Reventador. Luego de 26 años de tranquilidad, el 03 de noviembre de 2002, el volcán El Reventador hizo erupción. Esta erupción fue una de las más grandes registradas en el Ecuador durante los últimos 100 años y tuvo impactos económicos muy significativos, incluida la interrupción de carreteras y oleoductos, así como el cierre temporal del aeropuerto de Quito.
Desde entonces, este volcán se mantiene en actividad continua y se ha caracterizado por presentar una variabilidad en su estilo eruptivo, cambiando constantemente la morfología de su cráter y generando decenas de explosiones diarias, flujos de lava, flujos piroclásticos, y columnas de ceniza que alcanzan desde cientos de metros hasta pocos kilómetros sobre la cumbre del volcán (Almeida et al., 2019; Hidalgo et al., 2024; Vallejo et al., 2024). El volcán ha mantenido sus niveles de actividad internos y superficiales entre moderados y altos en los últimos 10 años.
Anexo técnico-científico
Actividad Interna
La actividad interna hace referencia a los procesos volcánicos que ocurren en zonas subterráneas, es decir, a varios kilómetros de profundidad. Esta actividad es vigilada y evaluada mediante estaciones sísmicas e instrumentos satelitales. Las medidas obtenidas por estos instrumentos permiten tener una idea general, aunque indirecta, de los procesos que ocurren en estas zonas profundas, que de otra forma son inaccesibles.
Sismicidad
La actividad sísmica del volcán Reventador es vigilada por una red compuesta por tres estaciones de banda ancha, una estación de período corto y dos estaciones infrasónicas, todas las cuales transmiten en tiempo real. La actividad durante la mayor parte del año, hasta la primera semana de octubre, se caracterizó por abundantes explosiones (más de dos o tres por hora) de mediana intensidad (Figura 1, izquierda). Luego, en los primeros días de octubre, se produjo una disminución gradual pero fácilmente perceptible en el número diario de estas explosiones de tamaño medio (Figura 1, derecha). Este patrón se ha observado anteriormente en este volcán y suele estar asociado con un cambio en el dinamismo de la actividad volcánica, que pasa de estar dominada por abundantes explosiones a caracterizarse por una actividad más efusiva (véase la sección sobre observaciones visuales).
Como fue descrito en el Informe Volcánico Especial – El Reventador – N° 2025-001 (https://servicios.igepn.edu.ec/url/NjMwMg==), la figura 2 muestra la sismicidad registrada en El Reventador desde las 14h00 TL del 12 de octubre hasta la misma hora del 13 de octubre. A las 18h23 TL (tiempo local), del 12 de octubre inició una señal de tremor volcánico de amplitud variable que duró 50 minutos (recuadro negro). La comparación del tremor con las imágenes de vigilancia permitió identificar que estuvo asociado con la ocurrencia de un flujo piroclástico en el flanco oriental del volcán.
Este flujo piroclástico se produjo durante el mencionado período prolongado de actividad efusiva relacionado con la aparición de un flujo de lava. Hasta el momento de redactar este informe, el número total diario de explosiones no ha vuelto a los niveles observados antes de octubre. Sin embargo, en las últimas semanas, el número diario de explosiones ha aumentado gradualmente y, actualmente sitúa en niveles aproximados al 50% de su pico anterior a octubre (Figura 3). Interpretamos estos datos como una indicación de que la fase efusiva, aunque no ha terminado completamente, está disminuyendo gradualmente y, eventualmente, volverá a una actividad dominada por las explosiones.
Actividad Superficial
La actividad superficial es aquella relacionada con los procesos volcánicos que ocurren en la superficie, es decir, hacia la atmósfera. Actualmente se caracteriza por presentar explosiones cuyas columnas de ceniza llegan hasta 2 km de altura sobre el nivel cráter. Desde el 3 de octubre se observó una emisión de gases y ceniza continua, en lugar de las explosiones puntuales que son el comportamiento más habitual.
Emisión de gases volcánicos
Desde la tarde del 3 de octubre de 2025, a través del sistema de cámaras de vigilancia, se observó una emisión continua de gases con contenido bajo de ceniza, con alturas entre 100 y 1500 m sobre el nivel del cráter. La emisión de gases se mantuvo hasta varios días después del evento del 12 de octubre, con alturas entre los 500 y 1500 m sobre el nivel cráter.
El sensor satelital TROPOMI registró emisiones de SO2 en El Reventador con valores menores a 33 toneladas en promedio, y de forma poco frecuente. Sin embargo, el día 9 de octubre registró un valor de 115,8 t, el cual se incrementó el 11 de octubre alcanzando las 265.5 t, siendo el valor más alto en los últimos dos años (Figura 4). Posteriormente, los valores de SO2 han descendido paulatinamente, colocándose por debajo del valor promedio (Figura 4) (Fuente de los datos: MOUNTS).
Anomalías termales
Adicionalmente, la figura 5 muestra la ubicación de las anomalías termales registradas por los sensores VIIRS y reportados por el sistema satelital FIRMS (Fire Information for Resource Management System) de la NASA para la zona del volcán El Reventador. Los puntos de color representan la ubicación y ocurrencia de las anomalías termales entre el 1 y el 30 de octubre de 2025. Además, el mapa incluye un polígono (líneas negras) el cual muestra los depósitos de los flujos de lava y flujos piroclásticos ocurridos el 12 de octubre 2025 cartografiados en el campo (ver sección Campaña de campo). El mapa muestra que la información satelital subestima el alcance de los flujos piroclásticos por aproximadamente 1 km en dirección oriente. El alcance máximo medido con la información satelital es de aproximadamente 1,8 km, valor que coincide con el cambio de pendiente del volcán, es decir, con la zona de mayor acumulación del material piroclástico, en donde el calor se preserva de mejor manera (Figura 5). Finalmente, luego de aplicar filtros de energía radiante (FRP) se obtiene un alcance máximo del flujo de lava de aproximadamente 1 km para el 25 de octubre.
Observaciones de los flujos piroclásticos desde las cámaras permanentes de vigilancia
El evento del 12 de octubre estuvo caracterizado por la generación de un flujo piroclástico, producto del colapso del frente del flujo de lava. La figura 6 muestra la zona del colapso (Figura 6, izquierda) y el avance del flujo piroclástico por el flanco oriental (Figura 6, central). El flujo piroclástico, descendió hacia la parte oriental del volcán y alcanzo una distancia de ~2450 m, llegando hasta los 1325 m bajo el nivel del cráter (ver secuencia de imágenes en Figura 6).
Como consecuencia de la generación y transporte del flujo piroclástico, el 12 de octubre se formó una pequeña quebrada en el flanco oriental del volcán, misma que se puede observar en la figura 7.
Campaña de campo para evaluación del evento del 12 de octubre
Un equipo de técnicos del IG-EPN visitó el volcán El Reventador entre el 14 y el 16 de octubre para realizar una evaluación del evento ocurrido a partir del 12 de octubre. Las observaciones fueron asistidas por un dron. Se constató la presencia de un flujo de lava que desciende por el flanco oriental del volcán. Este flujo de lava tenía una longitud de 810 metros, un ancho de unos 240 metros y un espesor de 9,1 metros. El flujo cubría un área de 124 000 m2 y tenía un volumen aproximado de 1,13 millones de m3. En cuanto a la temperatura alcanzada por el flujo de lava, mediante el sensor térmico que incorpora el dron, se pudo apreciar que esta sobrepasa los 550°C como se observa en la figura 8.
Mediante el uso del dron, también se pudo constatar que el cráter presenta dos ventos activos ubicados hacia el noroeste y sureste. En la figura 9 se muestra una comparación de imágenes correspondientes a abril y octubre de 2025, donde se observa un incremento en el área del cráter y modificaciones en su morfología interna.
En particular, el vento noroeste muestra evidencias de relleno, mientras que las temperaturas superficiales han aumentado, alcanzando valores superiores a 580 °C en octubre. Por otro lado, se evidencia un cambio en la dirección del flujo de lava, que pasó de descender hacia el sureste (en abril 2025) a dirigirse hacia el este (en octubre 2025). Este flujo también presenta un incremento en su temperatura, registrando valores por encima de 550 °C, lo que sugiere una mayor actividad efusiva durante el período analizado.
Durante esta campaña también se utilizó una cámara térmica portátil operada desde la base del anfiteatro del volcán. Las imágenes obtenidas permitieron estimar temperaturas para el flujo de lava, el material encauzado en la quebrada formada durante la erupción y de los depósitos de los flujos piroclásticos que se generaron el 12 de octubre (Figuras 10 y 11).
El flujo de lava presentó temperaturas en el rango de 229 a 557 °C. Su avance continuo pudo confirmarse a través de la variación de temperatura de la base del flujo (Figura 11; quebrada, círculos azules) debido al rodar de bloques, con un espacio de tiempo variable entre 5 y 10 min. Esto quiere decir que para el 15 de octubre el frente de lava se mantenía activo y avanzando lentamente.
El rango de variación de temperatura para la zona de la quebrada varió entre los 306 y 570°C. Finalmente, la zona de los flujos piroclásticos presentó temperaturas entre 170 y 132°C.
Como parte de trabajo de campo se realizó una inspección en el depósito generado por el flujo piroclástico del evento del 12 de octubre. Durante el reconocimiento de campo se constató que el suelo aún mantenía altas temperaturas, con valores entre 40 y 60 °C. Además, se observó que la vegetación circundante había sido completamente calcinada por el paso del flujo. También se pudo constatar que los bloques del flujo aún se encontraban calientes, con temperaturas de hasta 370°C (Figura 12).
Muestras de roca
Se recolectaron muestras de roca de varios bloques de lava que se encontraban calientes en el depósito del flujo piroclástico. Al analizar las muestras se pudo observar que corresponden a una andesita (~59 .% SiO2, en peso, ~2,68 g/cm3) poco vesiculada (~6%) con una matriz muy cristalina, con cristales de plagioclasa, clinopiroxeno, ortopiroxenos, olivino y magnetita (Figura 13). No se encontraron bloques vesiculados ni bombas en el depósito, confirmando que el evento desencadenador del flujo piroclástico fue el colapso del frente de lava.
Conclusiones
En base a las observaciones y al trabajo de campo realizado por los técnicos del IG-EPN, lo ocurrido el 12 de octubre de 2025 es interpretado como un evento aislado, de tamaño pequeño, asociado al incremento de la tasa de efusión (caudal de lava), lo cual generó un flujo piroclástico en el flanco oriental del volcán debido al colapso del frente de lava. Este flujo piroclástico tuvo un alcance de 2,5 km desde el frente del flujo de lava (3,1 km de distancia del cráter), y temperaturas de hasta 370°C en los bloques de lava. Por otro lado, hasta el 15 de octubre, el flujo de lava alcanzaba 810 m de longitud, cubriendo un área de 124 000 m2 con un volumen estimado en 1,13 millones de m3. Las temperaturas medidas tanto en el flujo de lava como en los ventos en la parte alta, sobrepasan los 550°C. Como resultado de la generación del flujo piroclástico se formó una pequeña quebrada que durante la visita de campo era alimentada por bloques rodados producto del avance de la lava, presentando temperaturas de hasta 570°C.
Las imágenes térmicas del cráter evidencian una evolución morfológica sostenida durante los últimos seis meses, marcada por el relleno parcial del vento noroeste y el cambio de dirección del flujo de lava desde el flanco sur oriental hacia el flanco oriental. Por su parte el análisis petrográfico indica que las rocas son andesitas con una matriz cristalina.
Dada su localización remota alejada de grandes centros poblados, no se espera que la actividad eruptiva actual del volcán El Reventador cause afectación importante.
Los flujos piroclásticos y flujos de lava estarían restringidos a la zona del anfiteatro (deshabitado). Así mismo, las nubes de ceniza pueden generar caídas leves en zonas cercanas localizadas en el cantón el Chaco y, con las condiciones actuales, NO se espera que la ceniza llegue a zonas más lejanas como las poblaciones del Callejón Interandino.
La actividad observada durante el mes de octubre de 2025, incluyendo el evento del 12 de octubre y la evolución posterior descrita en este informe, es coherente con el escenario eruptivo previsto en el Informe Volcánico Especial N.-001. En dicho documento se anticipaba la continuidad de una actividad efusiva moderada con generación de flujos piroclásticos y flujos de lava de corto alcance, restringidos al anfiteatro del volcán, así como emisiones de ceniza leves hacia el suroeste. Los datos recientes de sismicidad, desgasificación y observaciones de campo confirman que este comportamiento se ha mantenido dentro de los rangos esperados, sin evidencias de incremento significativo en el nivel de energía eruptiva ni expansión de los efectos hacia zonas pobladas.
Recomendaciones
• Debido a la generación de nuevos flujos piroclásticos se recomienda no acercase al volcán.
• Se recomienda tomar las medidas pertinentes de autoprotección, especialmente con respecto a posible caída de ceniza.
• En caso de lluvias fuertes, mantenerse lejos de los ríos y las quebradas que nacen en el volcán, ya que se pueden generar lahares de magnitud considerable.
Agradecimientos
Se agradece la colaboración del Departamento de Metalúrgica Extractiva (DEMEX) de la EPN por el análisis de Fluorescencia de Rayos X (FRX) y Difracción de Rayos X (DRX) de la muestra de lava colectada en el campo.
Referencias:
• Almeida, M., Gaunt, H. E., & Ramón, P. (2019). Ecuador’s El Reventador volcano continually remakes itself, Eos, 100.
• IGEPN (2025). Informe Volcánico Especial – El Reventador – N° 2025-001: Actualización de la actividad superficial. Quito, Ecuador.
• Hidalgo, S., Bernard, B., Mothes, P., Ramos, C., Aguilar, J., Andrade, D., Samaniego, P., Yepes, H., Hall, M., Alvarado, A., Segovia, M., Ruiz, M., Ramón, P., Vaca, M., & IG-EPN staff. (2023). Hazard assessment and monitoring of Ecuadorian volcanoes: Challenges and progresses during four decades since IG-EPN foundation. Bulletin of Volcanology, 86(1), 4. https://doi.org/10.1007/s00445-023-01685-6
• Vallejo, S., Diefenbach, A. K., Gaunt, H. E., Almeida, M., Ramón, P., Naranjo, F., & Kelfoun, K. (2024). Twenty years of explosive-effusive activity at El Reventador volcano (Ecuador) recorded in its geomorphology. Frontiers in Earth Science, 11, 1202285. https://doi.org/10.3389/feart.2023.1202285
Elaborado por: E. Telenchana
Con la colaboración de: D. Andrade, D. Sierra, F.J. Vasconez, S. Vallejo, B. Bernard, S. Hidalgo, H. Calderón, F. Vásconez.
Revisado por: M. Ruiz
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
Como parte de las actividades de vigilancia volcánica que el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN) lleva a cabo en los principales volcanes del Ecuador, un grupo de técnicos del IG-EPN realizó una campaña de medición y muestreo en fuentes termales y vertientes asociadas al sistema hidrotermal del volcán Cotopaxi, el día 22 de octubre de 2025.
Los técnicos realizaron la medición de los parámetros físico-químicos del agua y recolectaron muestras que serán analizadas en el Centro de Investigación y Control Ambiental (CICAM) de la Escuela Politécnica Nacional (EPN), para la determinación de los elementos mayoritarios.
Este tipo de muestreos se realiza de manera periódica en todos los principales centros volcánicos del país.
Adicionalmente, los técnicos realizaron pruebas para la medición de SO2 con una cámara ultravioleta (UV) portable. Este equipo fue obtenido como parte de los trabajos de colaboración interinstitucional entre el IG-EPN y la Universidad de Sheffield en Reino Unido. El principio de funcionamiento de la cámara UV, es similar al de la operación de los instrumentos DOAS, donde se aprovechan las propiedades ópticas del gas al interactuar con la luz solar para calcular su concentración y luego el flujo mediante espectrometría. El uso de cámara UV ofrece ciertas ventajas sobre el método DOAS como la capacidad de analizar el flujo mediante imágenes y por tanto puede ser utilizado en zonas de pequeño tamaño como campos fumarólicos.
El Cotopaxi atravesó su último proceso eruptivo entre 2022 y 2023, durante este periodo su actividad se caracterizó principalmente por emisiones de gases y ceniza, algunas de las cuales llegaron a producir caídas leves incluso en la capital.
Actualmente el volcán se encuentra en relativa calma y su actividad interna y externa es catalogada como “baja sin cambios”. Sin embargo, debemos recordar que el volcán Cotopaxi es un volcán activo y en caso de reactivación podría ser muy peligroso, por ello lo más importante es permanecer informados. Conoce el mapa de potenciales amenazas frente en caso de una erupción grande del Volcán Cotopaxi. ¿Dónde queda tu casa? ¿Tu lugar de trabajo? ¿la escuela de tus niños? Explora el mapa interactivo: https://www.igepn.edu.ec/mapas/amenaza-volcanica/mapa-volcan-cotopaxi.html
D. Sierra, S. Hidalgo
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
REPORTE DEL ENJAMBRE SÍSMICO FRENTE A LAS COSTAS DE PUERTO LÓPEZ, PROVINCIA DE MANABÍ
Resumen
Desde el 5 de septiembre de 2025, la Red Nacional de Sismógrafos (RENSIG) del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN), empezó a registrar un enjambre sísmico al oeste de las costas de Puerto López, provincia de Manabí (Informe Sísmico Especial No. 2025-012). Paralelamente, las estaciones de GPS, pertenecientes a la Red Nacional de Geodesia (RENGEO) ubicadas alrededor de la zona, registraron un movimiento hacia el oeste menor a 40 mm entre el 6 y el 26 de septiembre. El hecho de existir, de manera simultánea un enjambre sísmico y deformación, evidenciada por los GPS, es un indicativo de la ocurrencia de un sismo lento. Desde el inicio del enjambre y hasta el 21 de octubre se localizaron 302 eventos; sin embargo, se debe notar que la sismicidad disminuyó hasta niveles de base a partir del 26 de septiembre, manteniéndose bajo hasta el momento de la emisión de este informe. Las magnitudes de los eventos variaron entre 1.1 MLv y
5.6 MLv.
Sismicidad
La Figura 1.a muestra la distribución espacial y temporal de los eventos asociados al enjambre. En el panel superior se observa la distribución epicentral de los sismos, representados por círculos cuyo tamaño es proporcional a la magnitud y su color indica la fecha de ocurrencia. Los eventos más tempranos (en tonos azules) se concentraron frente a las costas de Puerto López, mientras que los más recientes (en tonos verdes y amarillos) se extendieron hacia el nor-este (tendencia promedio). En el panel inferior izquierdo se observa la variación de profundidad de los eventos respecto al tiempo, donde se distingue una mayor concentración de sismos superficiales (menores de 15 km) durante la primera mitad de septiembre y un ligero aumento en las profundidades hacia finales del mes. En el panel inferior derecho se muestra la variación de las magnitudes en función del tiempo, destacando el evento de mayor magnitud (5.6 MLv) ocurrido el 5 de septiembre, seguido por numerosos sismos de menor magnitud durante las semanas siguientes.
Evolución espacio-temporal del enjambre
En la figura 1.a se observa que la sismicidad asociada a este enjambre se inicia frente a Puerto López, cerca de la fosa (zona donde la placa oceánica de Nazca empieza a subducirse bajo el continente). Inicialmente, se nota una propagación de la sismicidad hacia el este (dirección del continente) hasta aproximadamente el 9 de septiembre y luego continuó propagándose hacia el norte hasta el día 16 de septiembre, fecha en que aparecieron eventos al oeste de la Isla de La Plata. El área total donde se concentra la sismicidad es de aproximadamente 50 por 35 km cuadrados.
La evolución temporal del enjambre sísmico se muestra en las Figuras 2 y 3, que presentan el número diario de eventos registrados y sus magnitudes entre el 5 de septiembre y el 20 de octubre de 2025. La Figura 2 detalla el registro diario de la sismicidad en base a los datos de la Red Nacional de Sismógrafos (RENSIG) del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN). La figura muestra un incremento sustancial (en forma de pulsos) de la ocurrencia de eventos, a partir del 5 de septiembre hasta el 19 del mismo mes, día en el que se detecta el mayor número de sismos (306). Posterior a esta última fecha la sismicidad empieza a decrecer progresivamente con eventos más esporádicos y de menor magnitud. En total se registraron 1 972 eventos, de los cuales se pudo localizar 280, durante el período previamente mencionado.
En la Figura 3 se observa la distribución temporal de las magnitudes, donde el tamaño de los círculos es proporcional al valor de magnitud de cada evento. Los sismos se concentraron principalmente entre el 5 y el 19 de septiembre, periodo durante el cual se registraron varios eventos de magnitud moderada, siendo la máxima magnitud 5.6 MLv para el sismo del 5 de septiembre a las 12:42 (Tiempo local) según se indica en el Informe Sísmico Especial No. 2025-011.
Observaciones GPS
Las estaciones GPS de la Red Nacional de Geodesia (RENGEO) detectaron un cambio de tendencia en el movimiento registrado por varias estaciones ubicadas en los alrededores de Puerto López, provincia de Manabí, entre el 6 y el 26 de septiembre: el GPS en Cabo San Lorenzo (MLEC) registró un movimiento hacia el oeste del orden de 2.02 mm; el GPS en Machalilla (MHLA), 12.85 mm; el GPS en Puerto Cayo (CAYO), 13.90 mm; y el GPS en la Isla de la Plata (ISPT), 38.17 mm (Figura 4). Estas observaciones corresponden a lo que se conoce como sismo o deslizamiento lento (Slow Slip Event; SSE por sus siglas en inglés).
Los sismos lentos presentan un comportamiento asísmico (no generan ondas sísmicas) y se identifican a través de los desplazamientos registrados por los GPS ubicados alrededor de la zona que se desliza, y/o de manera indirecta por la sismicidad asociada (enjambres sísmicos), que en el caso de Ecuador, ocurre simultáneamente.
Cabe recordar que un enjambre sísmico se caracteriza por un incremento de la sismicidad en un periodo de tiempo relativamente corto (días, semanas o meses) en una zona geográfica restringida, sin que durante su ocurrencia se reconozca un sismo principal y sus subsecuentes réplicas; en este caso particular, está relacionado a rupturas de pequeñas zonas en la interfaz de contacto entre las dos placas (Sudamérica y Nazca) como respuesta al deslizamiento lento, de un área más amplia.
Este tipo de fenómeno, alrededor de la Isla de la Plata, ha sido recurrente y se repite en períodos de entre 3 - 4 años.
En la figura 5 se presenta el movimiento horizontal registrado por las estaciones entre el 6 y 26 de septiembre.
Conclusiones
La actividad sísmica registrada frente a las costas de Puerto López durante el mes de septiembre corresponde a un enjambre sísmico asociado a la ocurencia de un sismo lento.
Durante el enjambre sísmico se registraron 1972 sismos (la mayor parte de muy baja magnitud), de los cuales 280 fueron localizados.
Las estaciones geodésicas detectaron un movimiento hacia el oeste coherente con la ocurrencia de un sismo lento.
En base a la sismicidad y los datos de GPS, el sismo lento se extendió entre el 05 y 26 de septiembre de este año. Al momento de la emisión de este informe la sismicidad a retornado a los niveles de base (niveles similares previo al 05 de septiembre).
El Instituto Geofísico se encuentra monitoreando y cualquier novedad será informada.
Jefe T.; Analista V.
ALVARADO A, MUÑOZ R
Colaboradores del Informe
GARCÍA A, HERNÁNDEZ S, MOTHES A, SEGOVIA M, VACA S, VIRACUCHA E, YÉPEZ M
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN) participó activamente en la Plataforma Nacional para la Reducción del Riesgo de Desastres – Ecuador 2025, organizada por la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Sociedad Alemana de Cooperación Internacional (GIZ). Este importante evento se llevó a cabo en el Centro de Convenciones Metropolitano de Quito (antiguo aeropuerto) los días 16 y 17 de octubre de 2025, bajo el lema: “Financiar la resiliencia, no los desastres”.
El evento reunió a representantes del Estado, la academia, la cooperación internacional y la ciudadanía con el objetivo de fortalecer la prevención, la inversión en resiliencia y la preparación ante emergencias.
Durante las jornadas, el IG-EPN contó con un stand informativo en el que dio a conocer el trabajo técnico y científico que realiza desde 1983 en el monitoreo y vigilancia sísmica y volcánica del país. Este espacio permitió acercar a la ciudadanía al conocimiento sobre las herramientas y tecnologías empleadas para la detección temprana de amenazas sísmicas y volcánicas, así como a los productos que resultan de su labor constante.
Los mapas de amenazas volcánicas recibieron mucha atención por parte de los visitantes, destacándose la curiosidad por los mapas de los volcanes Cotopaxi y Guagua Pichincha, fundamentales para la planificación territorial y la gestión del riesgo. Asimismo, se explicó el uso de diversas técnicas de vigilancia, como el monitoreo con cámaras térmicas, muestreo de gases, análisis GPS, inclinómetros, acelerómetros y sismómetros, que permiten evaluar la actividad sísmica y volcánica de manera oportuna.
Dentro de los diferentes ejes temáticos abordados en el evento, desde el eje de Alerta temprana y Acciones Anticipatorias, Fernanda Naranjo vulcanóloga del IG-EPN, participó con la ponencia titulada “Sistemas de Alerta Temprana: Experiencias de la comunidad Volcanológica internacional”. Compartiendo el panel con ponentes del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología del Ecuador (INAMHI) y el Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada (INOCAR), correspondientes al Sector Público.
La participación del Instituto Geofísico en este encuentro nacional reafirma su compromiso con la investigación científica aplicada a la reducción del riesgo de desastres, contribuyendo al fortalecimiento de la resiliencia y la seguridad de las comunidades ecuatorianas.
A. Chiluisa, F. Naranjo, G. Viracucha, J. Santo
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
© 2025 Instituto Geofísico - EPN
Inicio | Escuela Politécnica Nacional | Correo Institucional
Ladrón de Guevara E11-253, Aptdo. 2759 Quito - Ecuador.
Teléfonos: (593-2)2225655 ; (593-2)2225627 Fax: (593-2)2567847